sábado, 17 de octubre de 2015

Cómo hacer una foto a 15 kilómetros de distancia

En Expo París, un evento organizado por Canon, la empresa de fotografía ha marcado las líneas principales de lo que puede ser el futuro de la imagen en los próximos cinco años: fotos de 250 megapíxeles, vídeos grabados con un ausencia casi total de luz y videocámaras con resolución 8K.

MÁS INFORMACIÓN

Sony Xperia Z5, una resolución de pantalla más allá del ojo humanoCompacta para entusiastasOnce cámaras de vídeo profesional a precios para aficionadosDe las propuestas presentadas, destaca el prototipo de un sensor de imagen de 250 megapíxeles. Con él sería posible fotografiar un letrero a 15 kilómetros de distancia y leer lo que hay escrito. Aunque no parece probable que algo así pueda llegar a verse en una cámara en breve, Canon anunció hace unos meses que ya se encuentra desarrollando una cámara de 120 megapíxeles.La empresa dispone de las dos réflex con mayor resolución del mercado: las EOS 5DS R y EOS 5DS, de 50 megapíxeles. Aunque estos equipos están destinados a profesionales, a Canon también le permiten demostrar que cuenta con tecnología inalcanzable para las cámaras de los teléfonos y que las réflex, la gran baza de la empresa, siguen teniendo vida por delante.Prototipo del nuevo teleobjetivo 600mm f4 DO. / RAMÓN PECOLa alta sensibilidad a la luz es otra de las prestaciones con las que Canon ha sacado pecho. Es el caso de la videocámara profesional ME20f-SH, equipada con un sensor del mismo tamaño que el de las cámaras réflex de alta gama, pero con una resolución de tan solo 2,26 megapíxeles. Tras un testeo, comprobamos que, en efecto, puede captar imágenes con resolución Full HD casi en completa oscuridad. El secreto está en el peculiar sensor de la cámara, de cuatro millones ISO, una cifra muy superior a la que la competencia ha sido capaz de lograr.Canon también usa esta tecnología en sus cámaras de videovigilancia, un sector en el que la empresa procura introducirse para compensar el descenso de sus ventas de cámaras.

Imágenes 8K

Expo Paris ha acogido también la presentación de una cámara de cine capaz de filmar imágenes 8K: cada fotograma equivale a una fotografía de unos 35 megapíxeles. Sorprende, porque Canon se ha venido resistiendo a equipar sus cámaras réflex y compactas, con tan buena fama entre los profesionales del vídeo, con tecnología 4K, algo que incorporan con gran solvencia incluso algunos teléfonos móviles. Sensor de 250 megapíxeles con un objetivo acoplado. / RAMÓN PECOLos fotógrafos de naturaleza y deportes apreciarán el prototipo del 600 mm f4 DO. En su nueva versión, que solo ha podido probarse sin enfoque automático, reduce en un 30% el modelo anterior, una buena noticia para los profesionales que tienen que cargar con estos voluminosos equipos.Entre las nuevas cámaras compactas avanzadas de la marca destaca la Canon G5 X, una evolución de la solvente Canon G7 X, que sigue equipando un sensor de una pulgada con 20 megapíxeles y cuenta con un objetivo con zoom óptico de 4,2 aumentos bastante luminoso. A simple vista se perciben las principales novedades con respecto al modelo anterior: el visor electrónico que complementa a la pantalla, un componente de excelente calidad —tal y como se pudo verificar al probar durante unos minutos la máquina— y la incorporación de una zapata para flash.También el diseño de la cámara ha mejorado. Su ergonomía resulta más lograda y cuenta con nuevos controles. De nuevo, algunos echarán en falta que la cámara sea capaz de grabar vídeo 4K, sobre todo teniendo en cuenta que modelos similares de la competencia lo hacen, pero lo que más se extraña es una entrada de audio. De tenerla, sería una solvente videocámara de bolsillo.La principal pega de este producto es su precio, algo más de 800 euros. Una cifra muy similar a la de esos teléfonos móviles de gama alta que tantos quebraderos de cabeza están dando en los últimos años a las empresas de tecnología fotográfica.

sábado, 1 de agosto de 2015

Amazon pide un pasillo aéreo para sus drones

Amazon, la compañía estadounidense que más ventas hace por Internet, ha propuesto que se abra una ruta exclusiva en el espacio aéreo mundial para que drones —aeronaves no tripuladas— puedan entregar paquetes a sus clientes, según The Guardian. El plan de Amazon se ha dado a conocer el martes en una convención de laNASA celebrada en California. La compañía ha defendido que se trata de un modelo audaz para abrir una línea comercial con estos robots por ciudades y pueblos de todo el mundo.
El diario británico ha recogido las explicaciones de los expertos aeronáuticos de la compañía americana. Según éstos, el proyecto consiste en abrir una especie de pasillo o franja de entre 60 a 120 metros en el espacio aéreo. Así se crearía una ruta exclusiva reservada a estos aviones no tripulados y equipados con sofisticados equipos de localización. Sobrevolarían las localidades a una gran velocidad —111 kilómetros por hora— a una altura estimada de 120 a 180 metros sobre el nivel del mar.
Con la medida, el gigante del comercio por Internet pretende entregar los pedidos en 30 minutos, gracias a las ventajas que ofrece el vuelo robótico. The Guardianasegura que en la próxima década se prevé que cientos de miles de drones comerciales de distintas compañías sobrevuelen, sin prácticamente interferencia humana alguna, las ciudades para hacer entregas.
"El camino para garantizar la mayor seguridad es exigir que el nivel de complejidad del espacio aumente en la medida que lo hace la complejidad del vehículo", ha dicho Gur Kimchi, vicepresidente y cofundador de Amazon.
La Autoridad Federal de la Aviación de EE UU (FAA) ya rechazó en febrero la propuesta sobre el uso comercial de los aviones no tripulados que planteaba Amazon. La compañía amenazó entonces con trasladarse al extranjero, ante lo cual las autoridades norteamericanas respondieron dejando la puerta abierta al uso de drones en la mensajería, siempre y cuando se pudiese garantizar la seguridad. Finalmente, el regulador de la aviación americana le permitió hacer este tipo de vuelos en terrenos rurales de su propiedad en marzo como prueba experimental de la propuesta que realiza.

Insectos robóticos que andan y saltan por el agua

La robótica siempre bebe de la biología, desde Asimo hasta los robots zapadores que emulan perros, siempre hay un modelo natural en el que basarse. Inspirados en los zapateros, los insectos que se encuentran en aguas dulces, un equipo de científicos coreanos ha desarrollado un pequeño robot capaz de saltar y caminar sobre el agua, según ha publicado Science. Para construirlo, investigadores de la Universidad de Seúl estudiaron la cuidadosa forma de andar de estos insectos y la manera en la que controlan tanto la fuerza de sus patas como la que ejerce la tensión superficial del agua.En los últimos años se han diseñado diversos robots capaces de flotar y caminar sobre el agua. Las versiones anteriores de este robot concreto, llamado RoboStrider, incorporaban patas inspiradas en la forma cilíndrica de las del zapatero (Aquarius paludum), pero, por el camino, los investigadores descifraron cómo se mantienen estos insectos sobre el agua. Y descubrieron que, para no romper la primera película, los zapateros aplican siempre la energía justa, realizando movimientos constantes para transmitir las fuerzas a lo largo de la superficie.
El resorte que impulsa la última versión del insecto robótico también está inspirado en su homónimo animal, y es capaz de elevar los 68 miligramos del invento a 142 milímetros de altura sobre el agua. Al liberar la fuerza de forma gradual, la tensión superficial no solo mantiene a flote al robot, sino que se suma al impulso, de ahí que salte más alto desde el agua que desde tierra. Y lo que es más, este resorte permite un amerizaje seguro al amortiguar paulatinamente el descenso sobre la capa superior del agua. Tal y como se aprecia en el vídeo que acompaña la publicación sobre el trabajo, en el momento del despegue, el robot apenas altera la superficie del agua. E incluso cuando las patas ejercen toda su fuerza solo se levantan unas pequeñas gotas.

Farolas que están pendientes de lo que pasa alrededor

Entre las múltiples promesas de la Internet de las Cosas – una red de aparatos y equipamiento conectados por wifi y gestionados mediante teléfonos inteligentes – se encuentra la automatización de la vida cotidiana, ya sea buscar una plaza de aparcamiento, descubrir una blusa rebajada en el centro comercial o iluminar las calles cuando empieza a anochecer.
Pero resulta que el alumbrado público ofrece algo más que iluminación.
Mediante una combinación de LED y tecnología de datos masivos, el alumbrado público es la posible columna vertebral de un sistema capaz de usar miles de millones de aparatos para recopilar datos sobre congestión de tráfico en una intersección o sobre un consumidor que recorre el pasillo de cereales para el desayuno, por mencionar solo dos aplicaciones.
El alumbrado público es la posible columna vertebral de un sistema capaz de usar miles de millones de aparatos para recopilar datos sobre congestión de tráfico en una intersección o sobre los consumidores de alrededor
Sensity Systems, una pequeña empresa tecnológica de reciente creación que construye y gestiona redes de iluminación inteligente, anunciaba el lunes que ha atraído inversiones y alianzas de un grupo de grandes empresas, como Simon Property, importante promotor de centros comerciales, General Electric, Cisco y Acuity Brands, uno de los principales fabricantes de bombillas LED.
“Obviamente estamos entusiasmados con el futuro entorno inteligente, que es en lo que se está convirtiendo de hecho nuestro negocio de iluminación: está dejando de ser una actividad dehardware y transformándose en actividad de software”, comenta Beth Comstock, directora de la sección de innovaciones empresariales de G.E., que pretende vender su filial de electrodomésticos a Electrolux. “Francamente, lo que nos entusiasma es que la luz es mucho más de lo que está a simple vista”.
Las inversiones – de unos 36 millones de dólares, aproximadamente la mitad de lo que la empresa ha reunido desde su creación en 2010 – son más significativas por la procedencia que por la cantidad, afirma Hugh Martin, director gerente de Sensity, y ayudarán a ampliar y aportar escala comercial a lo que hasta ahora han sido principalmente proyectos piloto. Sensity trabaja con Cisco desde 2014 y ha instalado sus sistemas en lugares tan dispares como Newark en Estados Unidos, Bangalore en India, Adelaida en Australia, y Albertslund, un barrio situado a las afueras de Copenhague.
“Hay muchos ensayos, pero nadie ha pedido aún que le instalemos la ciudad entera”, comenta. “No es un trabajo fácil, y se llevará el dinero que estamos reuniendo”.
El sistema funciona mediante una combinación de LED y tecnología de datos masivos
De hecho, hay otras muchas empresas compitiendo por una parte del mercado de las luces, los sensores y el software, un sector en rápida expansión. Los LED han demostrado ser atractivos para ciudades y empresas que pretenden sustituir sistemas de iluminación viejos y devoradores de energía por otros que no solo se encienden y se apagan automáticamente, sino que reciben y transmiten datos sobre su propio estado y el de sus alrededores. Dependiendo de los sensores instalados o conectados, pueden detectar distintos factores y actividades, como movimiento, congestión, contaminantes, disparos o, cada vez con más frecuencia, un cliente determinado dentro o en los alrededores de una tienda.
A los ejecutivos de G. E. y Acuity les interesan los proyectos de ciudad inteligente, que usan una bóveda de farolas conectadas como infraestructura inalámbrica para coordinar servicios municipales, como aliviar la congestión del tráfico, detectar cuándo están llenos los contenedores de basura o incluso las conductas sospechosas en una plaza peatonal.
A los ejecutivos les entusiasma la perspectiva de que estas aplicaciones de seguimiento se adopten más ampliamente, pero a los defensores de la intimidad les preocupa que la tecnología se adelante a las consideraciones de uso responsable
Se espera que en los próximos años ayuntamientos de todo el mundo reemplacen 50 millones de bombillas anticuadas por bombillas LED. Y si bien a algunos les interesa principalmente pasar de las viejas tecnologías a otras que consumen menos energía y duran décadas, otros quieren emplear los ahorros en electricidad para pagar en parte los sensores y los programas informáticos que permiten un uso más avanzado de la electrónica y las capacidades de comunicación de los LED.
G.E. ha desarrollado también aplicaciones de compra inteligente, colaborando con Qualcomm para emplear una especie de sistema GPS capaz de indicar a los comerciantes la localización y la orientación de un cliente en una tienda situado a una distancia de cinco centímetros de, pongamos por caso, un estante o un expositor de productos.
Para Simon, que desarrolla y gestiona centros comerciales en todo el mundo, la inversión en Sensity forma parte de una transición general a una experiencia de compra automatizada en la que los consumidores puedan recibir en sus móviles alertas sobre plazas de aparcamiento cerca de su destino así como ofertas especiales de las tiendas del centro comercial por el que pasean.
Simon lleva varios años utilizando sistemas Sensity en unos cuantos emplazamientos, y los ahorros de energía así como las capacidades de gestión han impresionado lo suficiente a los directivos como para plantearse instalarlos en toda la empresa: unos 20.000 puntos de iluminación capaces de comunicarse con la red de Sensity.
Simon ha empezado a incluir cámaras para leer y analizar los patrones de tráfico rodado y peatonal en sus aparcamientos y tiene previsto diseñar y probar un localizador de plazas para aparcar, según Tim Earnest, director ejecutivo de explotación de centros comerciales.
“Hemos detectado varias áreas que en nuestra opinión pueden funcionar de manera más eficiente o proporcionar a los clientes una mejor experiencia con esta tecnología”, comenta Earnest. “Las posibilidades son mucho, mucho mayores. Pero obviamente tenemos que demostrar que podemos hacer estas cosas tan básicas y, a partir de ahí, seguir avanzando”.
Dependiendo de los sensores conectados, las farolas pueden detectar distintos factores y actividades, como movimiento, congestión, contaminantes, disparos o, cada vez con más frecuencia, un cliente determinado dentro o en los alrededores de una tienda
La empresa ya ha instalado un sistema para que los establecimientos puedan encontrar y atraer clientes y ha invertido en Swirl, una plataforma de comercialización móvil que mantiene una alianza con Lord & Taylor y gestiona lo que se conoce como balizas informativas, unos dispositivos dotados de Bluetooth y capaces de detectar un móvil inteligente y enviar mensajes con ofertas especiales o información sobre productos.
Recientemente Simon efectuó una prueba con Swirl y su propia red de balizas, Mobiquity, y demostró que una proporción relativamente elevada de clientes se trasladaba de las zonas comunes del centro comercial a Lord & Taylor tras recibir publicidad de una oferta. A los ejecutivos de Simon, la adición de la red de Sensity les permitirá contactar con los clientes desde que entren en el centro hasta que salgan de él.
“Sensity se convierte en la plataforma fundamental en las propiedades de Simon, y es posible añadirle redes, tecnología de aparcamiento, tecnología de seguridad y otros tipos de analítica de datos”, explica Sky Fernandes, gerente de Simon Venture Group, la filial inversora de la empresa. “Permite seguir y atraer al usuario de principio a fin, algo realmente interesante”.
Acuity, que ha concedido licencia para el uso de tecnología Sensity en las bombillas que vende, considera que el mercado está en las universidades y en los polígonos industriales, así como en las ciudades inteligentes y en la venta al por menor, según Richard K. Reece, director financiero de la empresa. Recientemente, Acuity compró ByteLight, que proporciona software de localización en interiores para bombillas LED, algo que permite localizar mejor a los clientes en un establecimiento, aunque tengan el teléfono en el bolsillo o en el bolso.
A los ejecutivos les entusiasma la perspectiva de que estas aplicaciones de seguimiento se adopten más ampliamente, pero a los defensores de la intimidad les preocupa que la tecnología se adelante a las consideraciones de uso responsable. Reece reconoce que esa preocupación existe, pero añade que la mayoría de los establecimientos están diseñando sus programas de modo que los clientes puedan activarlos a voluntad.
“En esta fase sigue tratándose en buena medida de pruebas piloto”, comenta, y añade que los comerciantes están experimentando para encontrar el equilibrio de acceso adecuado. “Hay una delgada línea entre ser útil y ser repelente”.
El centro comercial Brea Mall ya dispone de varias luces inteligentes Sensity, incluidos postes elevados en el aparcamiento y farolas de calle.

viernes, 31 de julio de 2015

Las mejores apps para sacarle partido al Apple Watch

Después de tres semanas juntos, la relación es sólida, intensa. Ya nos conocemos bastante bien, pero no dormimos juntos: el Apple Watchse queda en la mesilla de noche, recargando. Hay una aplicación,Sleep Cycle, dedicada a medir la calidad de mi descanso. Me gustaría usarla, pero tarda demasiado en cargar. Casi dos horas de espera que impiden que mida mi patrón de sueño.
El reloj sabe cuáles son mis pulsaciones en reposo, haciendo ejercicio y andando, pero se le escapan algunos detalles. En esa obsesión por empujarme a una vida más saludable, cada hora me pide que me ponga de pie durante al menos un minuto. La cuestión es que no hace una excepción aunque conduzca o esté en el cine. Usar la localización del teléfono o el sensor de movimiento podría evitar fácilmente esta situación.
En el cine se da una situación extraña, quizá molesta para los vecinos de butaca, cada vez que hago el gesto de llevarme palomitas a la boca, se enciende la pantalla. Se confunde y cree que estoy mirando la hora, pero, ¿por qué lo haría de manera rítmica y cíclica? Solución hasta que Apple se dé cuenta de que no miro la hora de manera compulsiva: comer con la mano derecha.
Find Near Me es, quizá, la 'app' más práctica. Basta decir qué se busca: un cajero, una estación de tren, un restaurante, un taller o una librería para que nos guíe hasta la deseada sin sacar el móvil del bolsillo
20 días son tiempo suficiente como para apreciar qué aplicaciones merecen la pena y cuáles son prescindibles. Estas son las mejores:
CityMapper es perfecta para los amantes de la puntualidad. Funciona con el transporte público de Madrid y Barcelona. Indica la mejor forma para hacer un trayecto combinando bus, coche, metro o tren con andar e ir en bici.
Weather Nerd, nada mejor para tener la ola de calor bajo control. Indica en qué momento del día es mejor no pisar la calle o si se avecina tormenta en 20 minutos. La deYahoo! presenta un diseño más pulido, pero no es tan práctica.
Find Near Me es, quizá, la más práctica de las que han salido. Basta decir qué se busca: un cajero, una estación de tren, un restaurante, un taller, una librería… La app muestra las opciones y nos guía hasta la deseada. Sin sacar el teléfono. Da sentido a la inversión en el reloj. Se supone que Siri tendría que cumplir con esta misión pero hasta que se ponga al día, nos quedamos con la aplicación.
Rules! es una gran opción para los ratos muertos de espera en la parada de bus, dentista o cita con los amigos. Se presenta como un juego, lo es, pero también ejercita la memoria. Cuesta 2,99 euros, un precio elevado para el formato, pero justificado.
Los que no pueden vivir sin las últimas noticias tienen EL PAIS, pionera en español en este formato. NYT y BBC también tienen propuestas interesantes para saber qué pasa en el mundo con solo mirar la muñeca. Para los que solo piensan en el fútbol, OneFootballofrece resultados, directos y el mercado de fichajes. WatchChessApp, la creación de los hermanos Soto está pensada para los amantes del ajedrez. Pioneros en este formato, su app salió el mismo día que se estrenó el reloj en Estados Unidos. Permite seguir partidas y torneos en tiempo real. La pantalla se convierte en el tablero con la retransmisión.
Una cosa es seguir un deporte y otra, practicarlo. Para los ciclistas,Strava es imbatible. Para los runners (y amigos del gimnasio)Runtastic es la más avanzada.
¿Qué canción es esa que suena? Shazam cumple con creces acertando. Lo mismo que hacía con el móvil, pero sin tener que sacarlo del bolsillo.
Twitter ha hecho un buen trabajo adaptándose a este minúsculo formato, pero Twitterrific presenta las menciones y tendencias de una manera más atractiva. En el caso del correo electrónico, sucede lo mismo con Spark.

OnePlus deslumbra con su nuevo smartphone

“Estamos tan convencidos de la valía de nuestro producto que lo publicitamos como el ‘2016 flagship killer’ (asesino de buques insignia de 2016). Porque creemos que sus características no encontrarán rival ni siquiera el año que viene”. Carl Pei, cofundador de OnePlus, no se anda con chiquitas cuando explica en una entrevista con EL PAÍS los puntos fuertes del Two, el teléfono móvil que ha presentado hoy. Sin duda, había gran expectación por conocer el segundo aparato de esta start up china que el año pasado revolucionó el mercado Android con su modelo inaugural, el One, y sacudió el imperio de Apple y Samsung. Han pasado 400 días desde entonces, un período inimaginable para ninguna otra marca, y no ha defraudado. “Es verdad que en el mercado actual es mucho tiempo, pero hemos hecho multitud de cambios y cada uno retrasa la producción entre dos y tres semanas. Queríamos disponer de un producto genuinamente diferente, porque ahora todos los móviles se parecen”.
En Europa el Two costará 399 euros en su versión de 64 gigas y 339 en la de 16 gigas
De hecho, OnePlus se ha desmarcado de la competencia incluso en la escenificación del lanzamiento, ya que ha decidido retransmitirlo a través de una aplicación especial para móvil utilizando la última tecnología de realidad virtual. “En un principio pensamos en organizar una conferencia convencional en San Francisco. Pero nuestros clientes están en todo el mundo, así que encontramos en esta técnica la solución adecuada para no dar la espalda a nadie. Era un riesgo, porque nadie lo ha hecho hasta ahora, pero queremos ser pioneros”, explica Pei. De hecho, OnePlus ha fabricado 30.000 visores que ha puesto a disposición de sus seguidores de forma gratuita —solo ha cobrado los portes—, y la exitosa experiencia puede marcar un punto de inflexión en la industria.

Lo mejor y lo peor

Diferentes presentaciones del nuevo 'Two'. / ONEPLUS
Lo mejor:
1. La cámara. Con el mayor sensor del mercado, una óptica luminosa, estabilizador óptico, y enfoque láser, garantiza imágenes de gran calidad que, además, se podrán disparar en manual y guardar en formato RAW.
2. El botón lateral. Es una novedad muy interesante porque permite elegir las notificaciones que queremos recibir sin siquiera sacar el terminal.
3. La velocidad. Con 4 GB de RAM, arquitectura de 64 bits, y un cerebro de ocho núcleos a 1,8 Ghz, los amantes de los juegos más exigentes no tendrán problemas al respecto.
Lo peor:
1. El diseño. No se diferencia en gran medida del resto de móviles, e incluso copia el botón con sensor de huellas de Meizu. La parte trasera, además, resulta demasiado aparatosa.
2. El precio. Aunque todavía está lejos de los buques insignia de Samsung y Apple, a 399 euros OnePlus 2 añade cien euros al One y se aleja de la competencia china, que, con Xiaomi y Meizu en cabeza, ofrece terminales muy decentes por cien euros menos.
3. Snapdragon 810.Aseguran desde la marca que la nueva versión del chip de Qualcomm no se calienta como sucede en otros móviles, pero Meizu, por ejemplo, decidió no utilizarlo en su último móvil "porque no está a la altura". Habrá que verlo.
Lo mismo sucede con el terminal en sí, cuyas características lo convierten en uno de los más avanzados y potentes del mercado. Al fin y al cabo, se trata del primer smartphoneque incluye 4 gigas de memoria RAM del tipo DDR4 y una nueva versión —que no se calienta— del procesador más potente de Qualcomm, el Snapdragon 810 de 8 núcleos a 1,8 Ghz. El Two inaugura también el uso de un puerto USB-C en teléfonos móviles, y, además, el suyo esconde una gran sorpresa. “Es reversible en ambos extremos. Eso quiere decir que da igual cómo lo conectemos, no hay dos partes diferentes”, explica Pei, orgulloso de un pequeño avance que han patentado. “Otro de los elementos exclusivos de nuestro terminal es el sensor de la cámara, que es el más grande del mercado”, apunta el directivo.
Eso sí, el número de megapíxeles, 13, no sorprende. “La calidad de una fotografía no depende solo de cuántos píxeles tenga, sino de su calidad”, justifica Pei. “Nosotros hemos preferido centrarnos en ese segundo punto y hemos utilizado píxeles un 35% más grandes que los habituales en los móviles, de forma que captan mucho mejor las imágenes en condiciones de poca luz”. Además de contar con una óptica de seis elementos muy luminosa (f 2.0), la cámara incorpora un estabilizador óptico, que ayuda a obtener imágenes nítidas y vídeos sin movimientos molestos de hasta calidad 4K, y un enfoque por láser que tarda menos de 0,3 segundos en preparar la cámara para el disparo. Por si fuese poco, la aplicación que OnePlus ha desarrollado en su propio sistema operativo —Oxygen OS, basado en Android 5.1— para controlar la toma de imágenes permite hacer vídeos a cámara lenta —120fps en resolución 720p—, y captar imágenes compuestas de hasta 50 megapíxeles.
OnePlus también se ha subido al carro de los lectores de huellas, y asegura que el suyo es el más rápido del mercado, más veloz incluso que el montado en el iPhone 6. “Al final del día desbloqueamos el móvil multitud de veces, y hemos calculado que eso supone una importante pérdida de tiempo a lo largo de la vida útil del aparato. Con la tecnología Touch ID no solo mejora la seguridad, también resulta más cómodo”. Además, Pei está convencido de que este tipo de tecnología ya está madura como para que se popularice, sobre todo en las compras ‘online’. “Por si fuese poco, queremos que sea posible pasar la información de los aparatos de un terminal a otro, de forma que cuando cambiemos de móvil no tengamos que estar leyendo de nuevo las huellas y todos los elementos de seguridad”, añade.
Otra de las novedades que incluye el Two está en el lateral metálico, donde han instalado un botón deslizante con tres posiciones que sirve para controlar las alertas que recibe el usuario. “Sucede a menudo que estamos en una reunión y el teléfono suena. Con esta nueva función podemos decidir cómo queremos recibir las notificaciones sin siquiera sacar el móvil, porque podemos controlarlo desde el bolsillo”, explica Pei.
Los viajeros también agradecerán que el Two sea ‘dual sim’, de forma que se puede mantener la tarjeta de casa y una segunda, local o de datos

La impresión 3D crea sus propios robots blandos

Un equipo de Harvard ha desarrollado con éxito un robot saltarín impreso en 3D con plásticos de distintas durezas. El robot, inspirado en los mecanismos de locomoción de las larvas de ciertos invertebrados, quema butano y oxígeno para impulsarse por medio de saltos. La investigación demuestra las posibilidades de la impresión 3D para solucionar problemas que hasta ahora frenaban el desarrollo de los robots con componentes plásticos.
Gracias a las nuevas impresoras —capaces de combinar distintos materiales—, los expertos en robótica dan un paso adelante en la evolución de los autómatas: llegan los robots de cuerpo blando. Así lo atestigua un artículo de Science. El estudio, liderado por el investigador de robótica blanca y microfluidos de Harvard Nicholas W. Bartlett, se inspira en ciertos invertebrados y su manera neumática de su movimiento para desarrollar una máquina capaz de desplazarse por medio de saltos y que supone una mejora considerable sobre el diseño original rígido.
La nueva técnica de construcción democratizará el acceso a los productos; incluso que sea posible fabricar robots en casa
El ingenio, impulsado por gas butano, es capaz de sobrevivir a más de 100 saltos, frente a los escasos cinco que soportaba su predecesor rígido. Además, es más barato, ligero, silencioso y, por tanto, más funcional. El robot está formado por un núcleo de plástico duro que protege los componentes clave —como la batería, el compresor o el procesador— envuelto por otro cuerpo blando que, a su vez, está formado por un resorte neumático semicircular, que asemeja un flotador. Por último, el robot incorpora tres piezas de silicona que hacen las veces de patas.
El logro ha consistido en combinar ambas partes, la rígida y la blanda, aprovechando las características de cada material. La máquina funciona de la siguiente forma: primero, el compresor manda aire a los apoyos que rodean el resorte, las patas se hinchan y el robot se inclina en la dirección hacia la que va a saltar. Después, el compresor llena el resorte con butano y oxígeno, se genera una chispa y la combustión lo impulsa a casi un metro de altura y medio de distancia. Resulta una manera sencilla y eficaz de desplazarse, pero también de probar la resistencia y efectividad de estos nuevos materiales.
Tradicionalmente los robots se han construido y pensado como esqueletos metálicos, rígidos, pesados y por ello caros y difíciles de construir, así que los científicos e investigadores llevan tiempo buscando una alternativa. Inspirada en la naturaleza, la solución ha sido apostar por lo blando, pero hasta ahora era complejo y difícil combinar distintos materiales de distintas resistencias, componentes blandos y duros.
La impresión en 3D lleva años impulsando el desarrollo de este campo de la robótica: permite la construcción de piezas que, hasta ahora, necesitaban moldes específicos, y que tenían que ensamblarse aparte. Las impresoras más punteras pueden combinar distintos plásticos de una manera mucho más orgánica.
Queda abierto el siguiente paso en la evolución de los robots. Esta técnica de construcción democratizará el acceso a los productos e incluso que sea posible fabricar robots en casa. También será posible diversificar los diseños: se crearán máquinas mejores y más baratas, capaces resistir más y de ir más lejos, de flotar o de introducirse por pequeñas grietas.

Aeromobil, un coche volador

A finales de la década del 90, Stefan Klein y Juraj Vaculik, estudiantes en la otrora comunista Checoslovaquia, solían sentarse en la orilla del Danubio y soñar. Desde Bratislava miraban hacía el oeste apuntando a Austria; anhelaban la libertad. Vaculik, estudiante de arte dramático, encontró una forma de escapismo en el teatro del absurdo. Mientras, Klein, un ingeniero que estudió diseño, realizó su propio salto con la idea de construir un coche volador.
Con la caída del muro de Berlín, estos dos jóvenes intensificaron su sueño. Dos décadas y media más tarde el anhelo se convertiría en realidad, y, con él, el futuro del transporte personal. Vaculik así lo explica: “En 2010 consolidamos la empresa. Yo me convertí en director general y principal inversor, y Stefan en ingeniero y jefe de diseño. Él viene de una familia de aviadores, por lo que los aviones han estado presente toda su vida. De niño le fascinaban los libros de Julio Verne y de Antoine de Saint-Exupéry. Pero nuestra principal inspiración ha sido siempre la búsqueda de la libertad, pues, durante la guerra fría, un avión era símbolo de libertad”.
Eslovaquia, país que, desde 2007, es el mayor productor de coches por cápita en el mundo
En Bratislava se encuentra la sede de Aeromobil, la empresa que estos dos soñadores han construido impulsados por el auge de la industria automotriz de Eslovaquia, país que, desde 2007, es el mayor productor de coches por cápita en el mundo. Se fabrican más de 571.000 automóviles, en una nación de cinco millones y medio de personas. “No sabemos si Eslovaquia será en un futuro el sitio donde fabricaremos, pero de momento es muy conveniente estar aquí puesto que contamos con alta tecnología”. Esta es la razón, apunta Vaculik, por la que casas como Volkswagen, PSA Peugot, Citroën, KIA Motors y otros proveedores fabrican sus coches ahí. De momento, Aeromobil se queda en Eslovaquia, pese a que se ha visto tentada a mudarse a Silicon Valley. “Es un fenómeno con muy buena reputación en los medios de comunicación”, prosigue el emprendedor, “pero también importantes start-ups se han consolidado en Israel, Suecia o China, como Waze, Spotify y Alibaba”.
El coche volador puede correr hasta los 160 Km/hora en tierra y en el aire volar hasta los 200
El coche volador es un bonito diseño biplaza en blanco y azul que puede correr hasta los 160 Km/hora en tierra y en el aire volar hasta los 200. Aeromobil alcanza una autonomía de vuelo de un poco más de 700 kilómetros. Es decir, se podría salir por tierra desde un domicilio en Madrid, llegar hasta un aeródromo cercano a la ciudad, desplegar las alas y volar hasta Barcelona. Eso sí, para lograr el viaje es necesario contar con una licencia de piloto de avión ligero.
Sin embargo, el Flying Car, como le llaman en inglés, no puede alcanzar gran altura. Se eleva como máximo hasta 3.000 metros, ya que su cabina no cuenta con un sistema de presurización ni con suministro de oxígeno. No obstante, sí está completamente equipado con un sistema de piloto automático y un paracaídas en caso de emergencia. El pequeño coche futurista utiliza gasolina regular de combustible, aunque la empresa ya está pensando en la idea de un híbrido.
Se eleva como máximo hasta 3.000 metros, ya que su cabina no cuenta con un sistema de presurización ni con suministro de oxígeno
En esta revolución de la industria automotriz, Aeromobil no está solo. Un competidor es Terrafugia, una compañía norteamericana que comenzó a forjar su proyecto en elInstituto Tecnológico de Massachusetts (MIT), y que ahora también intenta comercializar su producto. Como Aeromobil, Terrafugia ya ha probado su prototipo tanto en tierra como en el aire, con la diferencia de que sus esfuerzos están más centrados en ser un pequeño avión que también se puede conducir en distancias cortas.
Vaculik, quien fuera líder estudiantil durante la Revolución de Terciopelo, —un movimiento pacifista que logró derrocar al comunismo en Eslovaquia—, ha invertido 300 mil euros de su bolsillo, y busca más financiación para el desarrollo del producto. De abril a mayo, la empresa ha logrado recaudar cinco millones de euros. Hay inversores, e incluso le han ofrecido comprar la start-up, pero han declinado esta idea. Los inventores prefieren seguir con su sueño y buscar “dinero inteligente, de inversores serios”, explica Stefan Vadocz, portavoz de la empresa. Al hablar de dinero, no especifican cuánto costaría el vehículo volador. Lo que sí aseguran es que puede variar su precio de acuerdo al modelo, y la única certeza es que serían varios miles de euros, “más o menos el precio de un coche deportivo de lujo”, agrega Vadocz.
Al hablar de dinero, no especifican cuánto costaría el vehículo volador
El vehículo ya ha conquistado a unos cuantos amantes de los coches. Los primeros encargos pretenden salir para 2017, año en que la empresa espera estar completamente operativa. Una vez arranquen con el piloto automático, se fabricarían unos 250 coches anualmente por encargo, de forma similar como lo hace Ferrari o McLaren. Para alcanzar su objetivo, han incorporado a su equipo a un antiguo ejecutivo de McLaren y trabajan siguiendo las normativas de la Unión Europea (tanto en tierra como en el aire) para asegurar que el vehículo circule libremente amparado con la ley.
Los primeros encargos pretenden salir para 2017, año en que la empresa espera estar completamente operativa
La empresa espera ocupar el nicho vacío que dejó Tesla, la compañía de coches eléctricos que en sus inicios pretendía acaparar solo a un exclusivo mercado de vehículos de lujo, pero que ahora intenta acercarse a las masas.
A Juraj Vaculik le encanta la cita de Peter Thiel, cofundador de Paypal y uno de los principales inversores tecnológicos y gurús de Silicon Valley, quien en su último libro De cero a uno, dice: "No hay ninguna razón por la cual el futuro solo se invente en Stanford, en un centro universitario o en Silicon Valley". El director de Aeromobil sueña con convertir a Eslovaquia en un centro de tecnología europeo.

Los tres móviles más asombrosos del Congreso Mundial del Móvil

Los tres pabellones que ocupa el Mobile World Congress de Shanghái en el gigantesco recinto ferial de la ciudad están tomados por una interminable sucesión de empresas chinas desconocidas para el gran público. A diferencia de lo que sucede en la cita que los organizadores celebran en Barcelona, aquí grandes nombres internacionales como Samsung, LG, o HTC brillan por su ausencia. A pesar de que se trata de una feria mundial, el interés se centra en el universo paralelo que es China, donde la tecnología móvil vive una revolución sin precedentes, pero a su manera. Al fin y al cabo, el gigante asiático ya no es solo la principal base manufacturera de tecnología; también se ha convertido en el mayor mercado mundial y en ese territorio en el que multinacionales como Apple hacen su agosto con cada nuevo modelo. No obstante, hay espacio para una constelación de marcas entre las que no faltan extravagancias merecedoras de una mención. Por eso, hemos seleccionado las tres novedades más extrañas del MWC.
Huadoo V4. / ZIGOR ALDAMA

Huadoo V4

Sus cualidades saltan a la vista, pero el director del Departamento de Internacionalización de Huadoo, Tim Zeng, resalta una y otra vez la principal característica de este ladrillo futurista creado por una de las muchas marcas que han nacido en el corazón chino de las manufacturas de electrónica, la ciudad de Shenzhen: "Es 'triple resistente': o sea, que soporta grandes golpes sin dañarse, puede ser sumergido en agua, y el polvo y la arena no lo dañan". A juzgar por el aparato que tienen metido en una pecera para certificar que así es, Zeng no miente. Eso sí, uno se pregunta por qué Huadoo no ha blindado un hardware algo más exigente.
Si bien es cierto que la armadura de goma del terminal impresiona, no sucede lo mismo con su cerebro: se trata de un smartphone que incorpora procesador chino Mediatek 6582 de cuatro núcleos a 1,3 gigahercios y un solitario gigabyte de memoria RAM, muy alejado de lo que se espera del buque insignia de cualquier marca. Por si fuese poco, su sistema operativo sigue siendo Android 4.4.2. Claro que, teniendo en cuenta que se ha lanzado a un precio que ronda los 200 euros, mucho más no se le puede pedir. "Estamos convencidos de que nuestro móvil no es para los expertos en tecnología sino para quienes quieren hacer deportes extremos, por ejemplo, sin renunciar a sacarse un 'selfie' o conectarse a Internet en cualquier momento", explica el directivo. "Uno lo puede llevar de escalada, o a la playa, sin preocuparse de que vaya a dejar de funcionar", sentencia.


Snail Mobile W3D

Mejor dotado está el hardware delW3D de Snail Mobile, un teléfono que no parece un teléfono. Se mire por donde se mire, es una videoconsola portátil, como la Playstation PS Vita. Con diferentes mandos circulares a cada lado de la pantalla y botones estratégicamente ubicados en las esquinas tanto superiores como inferiores de su cuerpo alargado, es uno de los móviles mejor camuflados del Mobile World Congress. Sin embargo, basta con apretar el botón de inicio para acceder a la clásica página de Android, en la que aparecen las aplicaciones de siempre. "Nos dimos cuenta de que, con la mejora delhardware que han experimentado la mayoría de los smartphones y el aumento del número de videojuegos en el mercado, muchos jóvenes utilizan el móvil sobre todo para jugar online, pero no hay ninguno que esté realmente diseñado para ello, así que hemos decidido lanzar el W3D, que permite incluso jugar y ver películas en 3D", explica Xu Chongxian, director de Marketing de la marca china.
Equipado con otro chip quad-core del fabricante chino Mediatek, pero esta vez a 1,7 gigahercios., Snail Mobile ha decidido incluir dos gigabytes de RAM. "Sabemos que en el mercado hay terminales con tres o cuatro gigas, pero nosotros hemos optimizado los recursos para el juego, sobre todo para los gráficos, de forma que sacamos mucho más rendimiento a nuestro hardware que la competencia", añade confiado. Además, la propia empresa es desarrolladora de videojuegos, así que ha optimizado los más populares para hacer la delicia de sus seguidores con el nuevo terminal. Eso sí, curiosamente el W3D no se podrá adquirir todavía en China. "Comenzaremos a comercializarlo primero en Estados Unidos, a partir del 29 de septiembre", avanza Xu.
El Zopo Speed 7 Plus junto al 'smartwatch' de la misma marca Z-Watch. / ZIGOR ALDAMA

Zopo Speed 7

El Speed 7 que la marca china Zopo desveló el pasado miércoles no llama la atención ni por su apariencia ni por sus prestaciones. La razón de que esté incluido en esta lista, por lo tanto, hay que buscarla en la publicidad del terminal. Porque ahí está, sonriente, el bicampeón de Moto GP Jorge Lorenzo, quien ha firmado con la empresa china para convertirse en su rostro. Y no es una elección al azar, porque una fuente de la marca indica a EL PAÍS que si se han decantado por Lorenzo es porque quieren hacer de España el centro de su expansión internacional, que tiene como objetivos primordiales Europa y Latinoamérica. "Hemos visto que las ventas online en España funcionan muy bien —están siempre entre los más vendidos de Aliexpress, la rama internacional de Alibaba— y creemos que hay demanda de móviles potentes y de calidad a un precio razonable".
Sin duda, el Speed 7 no puede competir con las marcas emergentes como Xiaomi o Meizu, pero es consciente de que por los 200 euros que cuesta el terminal libre no va a tener gran competencia. Además, aunque el diseño es insípido, su buque insignia tampoco es desdeñable: incluye un chip Mediatek de ocho núcleos y 3 GB de memoria RAM, más que suficiente para cualquier usuario avanzado. Y el acabado metalizado le da cierto aire premium que puede ser una ventaja frente a otras marcas chinas que únicamente se venden en el ciberespacio, como Jiayu o Elephone. "Con la crisis ha aumentado notablemente la demanda en Occidente de móviles chinos con altas prestaciones pero un precio económico, y nosotros queremos estar primeros en la parrilla de salida para aprovechar esta oportunidad", comenta el empleado de Zopo que prefiere mantener su anonimato.

Una nueva forma de cargar baterías

Nikola Tesla sentía aversión por los cables. Imaginó y trabajó por un mundo en el que no fueran necesarios ni para comunicarse ni para transmitir la energía. La primera parte de su sueño se ha cumplido con creces: ahí están la radio, la televisión, la telefonía móvil y las redes wifi para demostrarlo. La segunda parte se ha hecho más de rogar, pero empieza a dar satisfacciones en forma de alfombrillas que recargan móviles y sistemas que se alimentan de las ondas de la televisión o el móvil.
Para lograr alimentar la batería de un móvil sería necesaria una potencia un millón de veces mayor
El siguiente avance en la energía sin cables se ha logrado, curiosamente, gracias a un sistema concebido para la comunicación: la wifi que utilizan la mayoría de los hogares. Un equipo de investigadores de la Universidad de Washington en Seattle (EE UU) ha utilizado un router para cargar a distancia baterías. De momento han conseguido alimentar dispositivos como los que utilizan pequeños electrodomésticos y mandos a distancia (las pilas de níquel-metal hidruro) y las pilas de botón de los relojes (pequeñas baterías de ion de litio). La revista MIT Technological Review recoge en un artículo el estudio, con un título ambicioso: "Alimentar los próximos miles de millones de dispositivos con la wifi.
El sistema presentado se denomina PoWiFi (acrónimo inglés de "alimentación a través de wifi") y funciona a distancias de hasta 8,5 metros. Para lograrlo, los investigadores crearon un sistema que recolecta la energía de la wifi y la suministra de manera continua a las baterías. 
Los investigadores presumen de que su logro resulta compatible con el uso habitual de la wifi y de que "no compromete significativamente su rendimiento" para conectar dispositivos a la Red y entre sí. Sin embargo, para el profesor de Radiocomunicaciones de la Universidad Politécnica de Madrid, José Manuel Riera, esto solo sería posible en "casas aisladas y distantes unas de otras", como las de las zonas residenciales de Estados Unidos, no tanto en los apartamentos y pisos en los que viven muchos europeos, por las interferencias de la conexión con las de los vecinos. "Cuando no estamos usando Internet, nuestro router solo utiliza un 1% del tiempo de transmisión. Son desconexiones de milésimas de segundo que aprovechan otras redes inalámbricas para transmitir", explica Riera. El uso para suministrar energía, en cambio, exige que el router transmita energía de forma continua. "En un entorno de mucho uso, como una universidad o una empresa, no se podría aplicar", ilustra el profesor.
A diferencia de los dispositivos que utilizan las frecuencias de televisión y telefonía móvil, este sistema trabaja con frecuencias de la banda ISMC (en la que se incluye la wifi, pero también Bluetooth yZigBee). La legislación de EE UU y Europa no limita su uso a las comunicaciones y por tanto, también podría usarse para alimentar pequeños dispositivos, según los autores.
El nuevo sistema suministra energía a las baterías a una distancia máxima de 8,5 metros 
Sin embargo, las limitaciones de potencia en Europa (100 milivatios) y EEUU (hasta un vatio, en determinadas condiciones) quedan muy lejos de la necesaria para cargar un teléfono inteligente. Un smartphone precisa 4 o 5 voltios. Para cargar su batería por este sistema, tendría que emitir una potencia un millón de veces mayor.
Además, las ondas que emite un router se difunden en todas direcciones (es precisamente esa cualidad la que permite utilizarlas para conectar dispositivos ubicados en diversos lugares de una casa), pero esa dispersión juega en contra de la potencia que son capaces de transmitir.
A pesar del inconveniente, en opinión del catedrático de Ingeniería Electrónica de la Universidad Politécnica de Valencia, José Sánchez-Dehesa, la investigación supone "un avance significativo" para mantener alimentados todo tipo de sensores de bajo consumo, como los que se emplean en domótica y en otras aplicaciones del Internet de las cosas. De hecho, el estudio se completa con dos nuevos dispositivos —una cámara y un sensor de temperatura— que se alimentan perfectamente a través del nuevo sistema. En la casa de Tesla habrían encajado bien.

Dos "hackers" logran controlar un coche a distancia

Dos piratas informáticos, sin más ayuda que una conexión de Internet, han demostrado que pueden controlar a distancia vehículos inteligentes, hasta el extremo de conseguir girar el volante, bloquear los seguros o desactivar los frenos.
Un redactor de la revista tecnológicaWired sufrió en sus carnes la experiencia, realizada en una vía pública para hacerla más real y terrorífica.
Los dos hackers, que consiguieron convertirse en dueños y señores de un Jeep Cherokee de 2014 —y que aparentemente pueden replicar el experimento en otros vehículos de Fiat Chrysler—, son Charlie Miller, ingeniero de seguridad de Twitter, y Chris Valasek, ingeniero de la consultora de seguridad IOActive.
El experimento comienza con ambos piratas informáticos conectados a una conexión inalámbrica a más de 15 kilómetros de la autopista por la que circulaba el conductor de Wired, que no sabía qué acciones tenían previstas los expertos en seguridad informática.
Primero, consiguen poner a toda potencia el aire acondicionado; posteriormente, cambian la emisora de la radio, elevan su volumen y activan los limpiaparabrisas; para, a continuación, desactivar la transmisión y el acelerador en plena marcha.
Para realizar todas estas acciones, los piratas informáticos no necesitan manipular físicamente el vehículo, solo una conexión de Internet, una dirección IP y un software propio que se aprovecha de una vulnerabilidad en el sistema digital Uconnect del fabricante Fiat Chrysler.
Los piratas informáticos no necesitan manipular físicamente el vehículo, solo una conexión de Internet, una dirección IP y un 'software' propio
En una demostración posterior llegan a controlar el volante del Jeep (algo que solo pueden hacer si el vehículo se mueve en reverso), bloquean las puertas e inhabilitan los frenos.
Además, el software que han creado les permite obtener información de geolocalización del vehículo y otros datos de telemetría.
Los hackers alertaron a Fiat Chrysler, que ya ha distribuido una actualización de su sistema UConnect, aunque ambos advierten que otros expertos informáticos pueden hallar modos de acceder a vehículos modernos, donde las funciones del motor, GPS y otros se canalizan a través de sistemas informáticos con conexión a Internet.
Precisamente hoy, dos senadores estadounidense presentaron un proyecto de ley para establecer estándares públicos de seguridad en automóviles y camiones, algo en lo que comenzaron a trabajar cuando Miller y Valasek comenzaron a demostrar los primeros intentos exitosos de controlar automóviles a través de Internet en 2013.